Desde hace nueve años, Maida Vaca se desempeña como presidenta de la Asociación del Adulto Mayor. Empezó a trabajar en esta institución como profesora de artes plásticas enseñando a los abuelos a bordar, pintar o cocinar. “Los abuelitos se encariñaron conmigo y el presidente de aquel momento, Édgar Salvatierra, me nombra vicepresidenta”, dijo Maida, de 68 años.
La meta
Al fallecer Salvatierra, la profe Maida asume mayor responsabilidad. “Esta asociación estaba abandonada, no había ni en que sentarse, con mis esfuerzos y caminando por diversas instituciones conseguí mobiliario. Hace tres años, abrí el comedor donde vienen a almorzar los abuelos, que pagan Bs 5. Vigilo que la comida sea sana y limpia.
Otra de mis tareas es supervisar la entrega de la beca alimenticia que por ley les entrega la Gobernación cada mes”, señaló.
Recientemente, el municipio apoya a la institución con un médico general que trabaja de lunes a viernes y brinda atención médica a los abuelitos.
La asociación cuenta con 540 socios. Un promedio de 100 abuelos visitan la institución ya sea por almuerzo, atención médica, etc.
Cuenta que esta asociación fue la primera que se abrió en Santa Cruz y la que tiene su instalación propia, gracias a Santos Gálvez, que consiguió el terreno y a Johnny Fernández, alcalde que facilitó la construcción.
La profe Maida nació en Rurrenabaque (Beni). Se crió en Santa Cruz y reside en la Villa, compró su casa en la avenida 16 de Julio.
“Mi vida ha sido muy bonita y disfruto de mi labor de servir a los abuelos”, expresó.