Belo Horizonte o “BH”, como llaman a la ciudad cariñosamente, es la sexta ciudad más poblada del Brasil, con poco más de 2,5 millones de habitantes.
La ciudad está rodeada por montañas de la Sierra de Curral que forman un bello fondo natural. Además de la naturaleza, la capital de Minas Gerais se destaca por sus tesoros arquitectónicos y por su rica producción artística y cultural.
Un marco para la ciudad fue el proyecto desarrollado en 1940 por el famoso arquitecto Óscar Niemeyer (1907-2012), con la creación de la región de Pampulha. En ella, se encuentra una de sus principales obras: el Conjunto Arquitectónico Moderno de Pampulha, inaugurado tres años después. La obra reúne al Museo de Arte de Pampulha, al Centro de Referencia de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de Belo Horizonte, al Iate Tenis Club y a la Iglesia São Francisco de Assis también conocida como la “Igrejinha da Pampulha”.
El 17 de julio de 2016, el conjunto pasó a formar parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Unesco, junto a 814 sitios culturales del mundo.
La gastronomía local es un capítulo diferente. Muy diversa, con raíces indígenas e influencia portuguesa, platos como “angu”, “tutu de feijão”, pan de queso, dulce de leche, feijão tropeiro, entre otras delicias, son los que se destacan.
Belo Horizonte está rodeada de montañas
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