Ha amenizado eventos de la Federación de Fraternidades Cruceñas, la ACCC y la Feccci, como también ha trabajado junto a artistas como Aldo Peña. En cada actividad tradicional aparece el Camba Gringo para armar un buri camba.
Hace 43 años que David Melnik fundó la Tamborita Cariño Camba motivado por su pasión por la música oriental, pero, sobre todo, para que la tamborita nunca muera.
Melnik más conocido como Camba Gringo por sus ojos celestes, su cabello rubio y su tez blanca, comenta que a lo largo de estos años han pasado cientos de músicos por la Tamborita Cariño Camba, luego se han independizado y han formado sus propias tamboras, situación que lo satisface porque está haciendo escuela y de esta forma se garantiza la vigencia de estos típicos instrumentos musicales tan usados en la Santa Cruz de antaño.
“Mi proyecto es cultural, es identidad, quiero seguir difundiendo la chobena, que es pura, está intacta, no se ha fusionado”
“Las nuevas generaciones tienen que escuchar los ritmos musicales orientales que interpreta la tamborita para fortalecer más su identidad cultural porque con la presencia de la tecnología y las redes sociales llega música de todos lados, pero siempre tenemos que dar un espacio a nuestra música que nos identifica”, consideró Melnik que tiene procedencia rumana, pero nació en la orilla del Piraí, cuando tenía dos años y medio murió su padre y lo crió su padrastro, Sixto Mercado, que era capataz de Noel Kempff Mercado en el Jardín Botánico.

“Mi padrastro amaba la música, crecí escuchando flauta, quena, acordeón, guitarra y zampoña”, recordó Camba Gringo que confiesa que sigue enamorado de la flauta.
“Mi proyecto es cultural, es identidad, quiero seguir difundiendo la chobena, que es pura, está intacta, no se ha fusionado”, resaltó.