“Cuesta mucho, pero hay que organizarse”

Hace 24 años que Victoria Zelada abrió el Instituto Victoria, el cual bautizó con su mismo nombre. Con la gran satisfacción de aportar al sector de la belleza y de la educación dice haber formado en todos estos años como 1.000 mujeres, aproximadamente, sin contar a los hombres que hacen cursos cortos de peluquería.
El Instituto Victoria con Resolución Ministerial 068/2015 abrió sus puertas en 1995 en la calle Charcas y desde 2000 se ubica en la Villa Primero de Mayo e imparte belleza y peluquería, corte y confección, manejo de máquina industrial, uñas acrílicas, esculturales y en gel, entre otros cursos cortos.
Victoria es madre de tres jóvenes: Gerardo Moisés (33), Juan Daniel (20) y José David (17), considera difícil ser empresaria y lidiar con la crianza y la educación de los hijos; sin embargo, esta feliz con lo logrado hasta ahora. “Cuesta mucho, pero hay que organizarse, siempre abrí el instituto en lugares que también podía vivir, para estar cerca de ellos. Recién cuando crecieron traté de separar mi vida personal del trabajo, me compré hace tres años una vivienda por Arroyito, pasando la Villa Primero de Mayo”, expresó la empresaria que uno de sus grandes sueños es contar con una infraestructura propia.
En el Instituto Victoria trabajan fijo tres personas, pero contrata de forma eventual profesoras para cursos rápidos.
“Es gratificante saber que muchas mujeres han mejorado sus vidas gracias a que aprendieron un oficio, creo que ese es el mejor pago y recompensa al trabajo que uno desarrolla, saber que se contribuye a que otras mujeres cuenten con ingresos propios haciendo lo que le gusta que es embellecer a las mujeres, cortarles el pelo, hacerle las uñas y el peinado de su preferencia para que luzcan radiantes”, expresó.