Desde el 22 de marzo Bolivia acata una cuarentena decretada por el Gobierno nacional para evitar la propagación del coronavirus, pese a las ayudas económicas expresadas en bonos, hay muchas familias que viven en extrema pobreza y no satisfacen sus necesidades de alimentación, porque son numerosas, no pueden cobrar el beneficio porque no tienen carné de identidad, entre otros motivos, situación que toca el corazón de algunas autoridades, empresarios, líderes y vecinos solidarios que tocan puertas, recolectan víveres y llevan a los barrios más alejados de las ciudadelas, con el único fin de saciar el hambre. La Villa es un barrio habitado por muchas personas con el corazón de oro, algunas salen a luz pública y otras prefieren el anonimato.
La Villa Primero de Mayo cumple 51 años de fundación este primero de mayo y por la emergencia sanitaria que vive el país sus autoridades no podrán organizar ninguna actividad festiva como se acostumbra realizar. “El aniversario de la Villa se festeja siempre con bombos y platillos hay un espectáculo con artistas locales, nacionales y de talla internacional”, recordó Santos Gálvez, el fundador del popular barrio que este año se quedará sin festejo, pero sí con el deber cumplido de haber acatado la normativa impuesta por los tres niveles de Gobierno.
La Villa que en sus inicios fue un monte, rodeado de curichis, lecherías y potreros, hoy es una zona con cerca de 300 mil habitantes, distribuidos en 108 barrios, una extensión territorial de 1.861 hectáreas, 40 unidades vecinales y una población estudiantil de 33.762 estudiantes.
Todo este crecimiento agigantado es gracias a sus habitantes, que en su mayoría son del interior del país que han convertido a la Villa en un destacado e importante distrito municipal.
Pero, la emergencia sanitaria por el coronavirus (Covid-19) que establece una cuarentena hasta el 1 de mayo (con posibilidades de ampliación) ha hecho que afloren los sentimientos de sus vecinos y autoridades que han mostrado su lado más solidario y de amor al prójimo, tal es el caso del concejal Raúl Saavedra, que gracias al Concejo Municipal repartió víveres y carne de cerdo en diferentes barrios de la Villa Primero de Mayo. “Es un trabajo que hago con el corazón, con mucho cariño para ayudar a la gente que más lo necesita”, expresó Saavedra, quien goza del cariño de los habitantes del popular barrio.
También el diputado Andrés Gallardo donó dos túneles de desinfección para ser colocados en los concurridos mercados Coarco y San Juan, los vecinos agradecieron el gesto porque les mejora las condiciones de bioseguridad y así evitan el contagio y propagación del coronavirus.
Mientras que el profesor Francisco Santa Cruz con un grupo de vecinos se ha organizado para hacer donaciones de víveres a las ollas comunes y llegar a los barrios Terrado I, II, III, Tatú I y II y 12 de Octubre, entre otros.
“Pido a los vecinos que dejen aflorar sus sentimientos y si tienen la posibilidad de compartir lo que tienen con los más necesitados que lo hagan porque todos somos mensajeros de Dios”, expresó Santa Cruz, quien agradece a la Gobernación cruceña, instituciones, fundaciones y empresas por la ayuda.
Por su parte, Andrés Romero, presidente de la Federación de Comparsas Carnavaleras de las Ciudadelas (Feccci) y presidente del barrio Los Andes junto con cuatro miembros de la agrupación Villanos VIP, como Jaime Gutiérrez que logró recolectar más de 1.000 raciones de alimentos gracias a las donaciones de sus amigos y empresas del sector refrigeración para donar a las familias más necesitadas, se han propuesto a ayudar.
Romero dijo que han tocado las puertas del Hipermaxi, de una constructora y de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia (SIB), cuyos miembros Juan José Hinojosa y Marcelo Peña han colaborado.
“Hemos conseguido unas 2.500 raciones, entre ellas unas 1.500 corresponden a la ayuda del Hipermaxi (para la Pampa, Villa y Plan 3.000) como también víveres para 15 ollas comunes.
Romero, también agradece mucho a Larri Miranda que prestó su jeep para repartir los alimentos a los diferentes barrios y además que es conocedor de las familias que necesitan ayuda porque trabaja en una institución de la Villa.
Carlos ‘Chiquito’ Lino ha colaborado para recolectar alimentos entre algunos grupos que eran parte del paro cívico por la lucha por la democracia (fraude electoral) que duró 21 días.
“Estamos satisfecho con la ayuda realizada porque hemos visto la alegría de los niños al recibir las bolsas con víveres, en algunas casas salían hasta 14 menores”, expresó Romero que también resalta que jamás pensó llegar a barrios tan alejados como el Chipeno I y Chipeno II, del Plan 3.000.
“Ver esos rostros de las personas de la tercera edad felices por la ayuda, es gratificante, es una pena realmente lo que se ve en los barrios alejados, mucha gente enferma que ha dejado de ir a los hospitales por miedo a contagiarse, hay mucha pobreza que toca la sensibilidad”, expresó, uno de los principales líderes de la Villa.
Romero también resalta el apoyo del coronel Cortez, Subcomandante del DP5, que ha ayudado con la seguridad. Mientras que el hospital Hernández Vera, recibe pacientes con Covid-19 y también ha colaborado con la atención de pacientes en estado de emergencia.