El futbolista Ronaldo (21) es hijo de Fernando Martínez, un inquieto y luchador dirigente del barrio 4 de Febrero, de la Villa Primero de Mayo, quien está lleno de orgullo de tener un hijo en el equipo Royal Pari que recién ascendió a la primera división del fútbol boliviano.
Ronaldo Martínez Severiche se inició en el deporte a los 11 años de edad en el Club Blooming, donde permaneció hasta los 17 años, luego pasó al equipo El Torno para jugar la Copa Bolivia para subir a la categoría Nacional B, de la Asociación Boliviana de Fútbol (ACF), campeonato donde se corona campeón su equipo.
Después pasó al equipo Argentino Juniors para luego formar parte de las filas de Royal Pari, que se prepara para su primer debut en la liga profesional del fútbol boliviano frente a Blooming, el 28 de enero, a horas 19:30.
“Llegamos a la primera división del fútbol boliviano con mucho esfuerzo y disciplina”, expresó el talentoso jugador que se desenvuelve en la cancha de volante por derecha y su juego se caracteriza por ser rápido, además deja en el campo de juego garra y mucho compañerismo.
El talento que surge desde un escondido barrio de la Villa tiene como sueño llegar al fútbol europeo y alcanzar el mismo nivel de su ídolo Cristiano Ronaldo, del Real Madrid.
“Me falta un poco de fuerza en velocidad y experiencia”, remarca el futbolista que le ha costado mucho surgir en fútbol porque su padre migró a otro país cuando él empezaba a dar sus primeros pelotazos en la cancha y su madre tenía que llevarlo junto a sus dos hermanos a las clases de fútbol.
“Mi madre nos llevaba a los tres a entrenar, mi hermano mayor llegó a jugar en Real Santa Cruz y el segundo debutó en Aurora, pero se fracturó el brazo”, comentó lleno de orgullo el menor de cuatro hermanos.