Hace mucho tiempo que Nancy Alejandra Sosa Bramini se dedica a tejer zapatos, accesorios para el cabello, como vinchas, moñas y pañoletas, además de vestidos, blusas, chompas, mantas, tapetes, cenefas, portaservilletas, centro de mesas y cojines.
Alejandra es una experta en el tejido, capaz de elaborar cualquier modelo que el cliente quiera, no hay límites para su creatividad y habilidad a la hora de tejer.
La artesana dice que su suegra Luisa Michelin le enseñó a tejer, de ella aprendió este oficio que considera un pasatiempo. “Me encanta lo que hago, estoy pendiente de los modelos y de las nuevas tendencias, el tejido es una obra de arte que si logras plasmar lo que te imaginaste te sientes satisfecha, realmente me gusta lo que hago”, expresó la emprendedora, que tiene como meta tener un taller donde pueda producir más y generar más fuentes de empleos.
Actualmente Alejandra trabaja con su madre y su hija, forman un equipo dinámico y con mucho amor por lo que hacen, es un sentimiento que va más allá de la remuneración económica.
Antes tejía por encargo de los familiares, amigos y conocidos, pero gracias a las redes sociales, como el Facebook y el WhatsApp ha captado más clientes.
“La tecnología es una de las herramientas más útil a la hora de trabajar, antes tenía que ofrecer mis creaciones en las reuniones familiares y juntes de amigas, en la actualidad solo con difundir una foto de mi trabajo recibo pedidos, no necesito también trasladarme a una agencia del banco, pues las entidades tienen banca digital y a través de ese medio, cancelan mi trabajo”, expresa la creativa que considera su trabajo de buena calidad.